Con el objetivo de minimizar al máximo los riesgos y garantizar la protección tanto del personal como de los clientes, las estaciones de servicio intensifican sus protocolos en materia de seguridad. Estas medidas nacen ante la necesidad de actualizar los procedimientos producto de nuevos desafíos tanto operativos como tecnológicos, además de permitir reforzar el cumplimiento de las normativas nacionales e internacionales.
Según estudios de seguridad industrial, el 80 % de los accidentes en entornos con materiales inflamables se debe a fallas en los procedimientos operativos o a errores humanos evitables con una correcta capacitación. Ante este desafío, la Cámara de Empresarios del Combustible impulsa de manera constante la formación del personal de estaciones de servicio, considerando que la capacitación es clave para la prevención de accidentes.

Esta semana, la unidad de capacitaciones de la Cámara inició sus charlas sobre prevención de riesgos a cargo del inspector en salud ocupacional Greivin Fallas, donde el personal de la estación de servicio Autopista Santa Ana tuvo un espacio para reforzar protocolos para evitar accidentes. De acuerdo con Emily Castro, las gasolineras son espacios en los que en cualquier momento se pueden presentar eventos y para la administración es fundamental que el personal en pistas atienda adecuadamente las situaciones apegadas a buenas prácticas.
“Hace unas semanas, un breakaway se soltó del dispensador y generó un derrame considerable de combustible y, gracias al accionar en equipo de los colaboradores, se pudo aplicar el protocolo adecuado de manera que dicho riesgo no se convirtió en un accidente. Por esta razón, reforzar estos conocimientos mediante las capacitaciones es vital para nosotros”. Agregó Castro.

Para el director ejecutivo, José Miguel Masís, el refuerzo de estos protocolos no solo protege a los trabajadores y clientes, sino que también contribuye a una operación más eficiente y sostenible. “Nuestra organización seguirá apostando por la capacitación permanente y la adopción de tecnologías seguras para garantizar el cumplimiento de los más altos estándares en la industria del combustible”, mencionó Masís.
La seguridad en las estaciones de servicio no es solo una obligación regulatoria, sino un compromiso continuo con la prevención y el bienestar tanto de colaboradores como de los clientes. La Cámara de Empresarios del Combustible reafirma su compromiso con la seguridad y la actualización permanente de protocolos para reducir riesgos y mejorar la eficiencia operativa.